LOS PINCHA GLOBOS

Es increíble la facilidad que tienen algunas personas para pinchar globos. Uno puede estar volando por la nubes de felicidad hasta que una de estas personas haga, diga o simplemente emane algo para que tu felicidad se disipe inmediatamente. Una vez esfumada tu felicidad es difícil que vuelva, por lo menos no en el corto plazo. El cerebro se calienta, centenares de pensamientos se disparan como pochoclos, pero pocos quedan en el balde.

Lo irónico de los pincha globos es que muchos no saben el efecto que generan con su proceder. Sí, evidentemente hay muchas personas que intencionalmente pinchan globos, pero muchas lo hacen sin querer. Todos en algún momento le pinchamos el globo a alguien, tal vez porque nos caía mal, o porque no le dabámos mucho crédito, o porque estábamos de mal humor y nos queríamos descargar, o por alguna otra razón, que genralmente, es infundada. Si se puede prevenir, por qué pincharle el globo a alguien?

Afortunadamente también existen los infla globos, esas personas que hacen, dicen o emanan algo que te impulsa, que te baña de actitud positiva. La gran mayoría de las veces es genial encontrarse o tener cerca a este tipo de personas. Le podés contar tu deseo, tu plan, o incluso algo malo que te haya pasado, que luego te vas a sentir excelente! Muy probablemente todos también fuimos infla globos en algún momento, sólo espero que no le hayamos inflado el globo de sarcasmo; siempre está el que te incita cruzar el Atlántico a nado.

En conclusión, creo que todos nos deberíamos proponer de forma conciente, no sólo de no pinchar globos, sino de inflar alguno que otro de vez en cuando. El aire no escasea, está disponible, sólo hay que encausarlo.