martes, 4 de noviembre de 2008

100% STARBUCKS


Ayer pisé por primera vez el único Starbucks en Argentina. Compré un Frappuccino y me transporté a Mi Starbucks personal, el que tiene la mejor actitud, el de la esquina de José Ortega y Gassete y Nuñez de Balboa (Madrid, España). Muy groso!

Hace más de siete meses que no consumía un Frappuccino y lo extrañaba muchísimo! Fue un flash, tanto por la bebida como por la memoria asociativa de su sabor. Normalmente son los olores que me recuerdan momentos vividos pero esta vez fue una bebida. Es increíble el poder que tienen algunos productos tan simples para generar sensaciones diversas.

Emprendí un viaje lleno de nostalgia y alegría que hacía escala en grandes momentos compartidos con mi gente querida. Navegué mis memorias sin rumbo hasta que la poción mágica se terminó de consumir. En mi trip recordaba mañanas en el Starbucks de Chueca y en el de Padre Damian con Gonza, Fede, Fran y Vanesa, mediodías en el de Serrano con Vero, María, Meme, Javi y Luigi y tardes en el de Ortega y Gasset con Pinda, Nacho, Blas, Abu, Pancha, Mar, Pato y las chicas. También recordaba el Starbucks de Montecito (CA) en el que frenaba todas las tardes cuando volvía en bici de SBCC y el de Cambridge (MA) cuando pasaba a visitarlos a Alec y a Feli. Como diría Guille de Mafalda: "¡Viste todas las memorias que hay en un Frappuccino!".

1 comentario:

Anónimo dijo...

grande Patova!! te felicito por los nuevos desafios en Australia, me alegro mucho porque te lo mereces..

un fuerte abrazo

Nacho AC